miércoles, 10 de febrero de 2016

El chico indicado en el momento equivocado



"Un día ocurrió, como la mejor de las suertes, te encontré. 
Encontré a mi alma gemela, pero las circunstancias nos hicieron coincidir en el momento incorrecto.
Llevaba meses en aquella web para encontrar pareja, pero en todo ese tiempo nadie había llamado mi atención. Hasta que un 18 de noviembre, alrededor de las diez de la noche (ya sabes, tengo buena memoria) di con tu perfil. 
Tu foto me transmitió, no sé cómo explicarlo, ese algo que hace que te fíes de las primeras impresiones y te lances de cabeza a cometer una locura. Hablamos muy poco los primeros días, y nuestras conversaciones eran triviales, tus perros, los míos, tus entrenos y los resultados de tu partido del sábado... 
Pero mi impulsividad hizo que hiciera algo que hasta ese momento, nunca me había atrevido a hacer, darte mi teléfono. 
Y fue ahí, a partir de un 24 de noviembre, bien temprano, con un mensaje tuyo dándome los buenos días, donde comenzó todo. 
Largas charlas contándonos nuestros gustos, nuestras vidas, nuestras cosas… Y darnos cuenta de que teníamos mucho en común y compartíamos demasiado. 

Y si, como tú mismo me dijiste una vez, el destino te había puesto ahí para mí? 

Solo fueron necesarios 12 días, para que me enfrentara a todos mis miedos y me lanzara a quedar contigo. 
Y a partir de ahí, todo fue una locura, o al menos para mí.
No puedo olvidar tú sonrisa, ni esa mirada hipnótica, que me costaba mantenerte la primera noche que nos vimos, ni tus besos, la mayoría de ellos apasionados, y otros tantos dulces y llenos de cariño y ternura, ni como me abrazabas tan fuerte, que con ello recomponías todos los pedazos rotos de mi ser y lo acompañabas con mimos y caricias que hacían que entre tus brazos, me sintiera a salvo de todo y de todos. 
Ni esa sensación al saber que iba a verte y hacia que mi corazón latiera a mil por hora y mis piernas temblaran sin remedio.
Desgraciadamente tú y yo,nos encontramos en un mal momento,de habernos conocido antes, quizá podríamos haber vivido algo inolvidable y perfecto. 
Lo siento tanto, me duele no poder hacer nada al respecto.
Llegó el adiós… una mañana, la última, me abrazaste fuerte, me besaste y nos despedimos, como hacíamos siempre después de pasar el día anterior juntos y la noche compartiendo la cama. 
De haber sabido que sería la última, no te habría soltados jamás.
Cada día intento seguir con mi vida, con la convicción de que ese adiós fue acertado, que sucedió en el momento justo y por desgracia, las circunstancias no nos favorecieron.
A menudo te decía que te quería, y es cierto, y te sigo queriendo, pero como se quiere a esas personas que hacen tu mundo mejor, y tú hacías que el mío fuera especial solo por estar a tu lado. 
No puedo asegurar que en ti encontré al chico de mi vida y que no encontraré a otro como tú, pero sí puedo decir que hasta hoy, fuiste el ideal, el indicado, aquél que sacó lo mejor de mí. 
Conseguiste cosas que nadie hasta la fecha había logrado. 
Contigo siempre tenía la sonrisa dibujada en la cara, me sentía bien conmigo misma.
No llegue a enamorarme, a pesar de lo que tú crees. 
Me ilusione y te trate como te merecías, ni más ni menos. 
Con cariño, dulzura, amor… 
Porque eres un ser excepcional que se merece eso y mucho más. 
Me encariñe, te quise y te quiero muchísimo como persona, y sé que te necesito en mi vida, porque mi mundo es mucho mejor desde que tu estas en él.  
Siempre te recordaré como el ser más maravilloso que conocí. 
Te vi y mi intuición fue clara, eras ese chico especial, el indicado, pero la vida se equivocó. 
No fue tú culpa, tampoco la mía; fue cosa del destino, que tristemente me hizo coincidir contigo… con el chico indicado, en el momento equivocado.
Si algún día lees esto, quiero que sepas que fuiste el chico perfecto para mí, tuviste todas las cualidades que buscaba, coincidíamos en innumerables cosas y fuimos, ante todo, amigos (y espero que podamos seguir siéndolo). Pero el destino a veces es así de cruel.
Quién sabe si en el futuro, el destino cambiara sus planes para nosotros…"


Y esta canción, que la noche antes de vernos cara a cara por primera vez, me enviaste via whattsapp, diciéndome que la letra decía cosas que pensabas de mí. 
Y ahora, tonta de mí, no puedo parar de escuchar.

2 comentarios:

Cris dijo...

No puede ser que algo tan unico y especial acabe asi como asi... Que lastima y que pena mas grande :(

Opiniones incorrectas dijo...

Hola Pandora, te he encontrado por las estadísticas de mi blog ;)

Lo que es tuyo, volverá; pero si nunca lo ha sido, lo reemplazará algo mejor.

Un beso