martes, 25 de agosto de 2020

Carta ilusa

Querido tu (ya sabes quién eres) :

No sé muy bien porque te escribo esta carta, cuando cabe la posibilidad de que no la leas nunca.
O si lo haces sea dentro de días, semanas o quizás meses.

Cuando nos conocimos y te dije que tenia un blog (te pase el enlace y leistes algunos de mis posts)  me preguntaste sutilmente "Voy a tener mi propia entrada también?" y yo te conteste un
"Ya veremos" acompañado de un emoji sonriente.

Desde el inicio de todo esto hoy hace justo dos meses, tuve muy claro que serias protagonista de uno de mis post (o de muchos, ojala)

Nos conocimos hace 61 días, casi por casualidad.

Había entrado en la app de AUT con la intención, de borrarla, porque ya estaba harta de todo y de todos los tíos. Pero antes de proceder a la eliminación me dio por mirar si alguien me había enviado un hechizo. Y ahí estaba el tuyo.

De primeras me gustaste mucho, eras y eres el perfil de chico que me encanta.
Y luego al leer tu perfil, fue el empujón definitivo para aceptar tu hechizo y esperar que me escribieras.

No iba con idea de nada, simplemente de charlar con alguien tán friki como yo.

Porque como ya te dije en aquel entonces, yo llevaba meses conociendo a alguien con idea de tener algo.

Pero bastó una sola noche, esa primera noche en la que estuvimos más de 8 horas seguidas escribiéndonos sin parar , para darme cuenta que ya no quería nada con esa otra persona,
y que quería seguir conociéndote y saberlo todo de ti.

Nuestras charlas interminables siguieron, y en apenas 3 días me atreví a hacer algo que no había hecho nunca, hablar por teléfono con alguien a quien conocía de tan poco tiempo y encima por internet.

Esas llamadas de 6-7 horas, hablando de todo y a veces de nada, eran todo lo que deseaba al llegar el final del día. Que me llamaras y escuchar tu voz.

Todo parecía perfecto.
Una serendipia ideal y mágica.
Sin yo buscarte, el destino te había puesto en mi camino.

Lo único malo de todo ello, la distancia.

Esos 300 kilómetros que a simple vista no eran un obstáculo, pues tu tienes a toda tu familia aquí, cerquita mio, y vienes a menudo por estas tierras, y yo, que no tengo ningún problema (por ahora) para ir hasta allí todas las veces que sean necesarias.

Pero ahora esos 300 kilómetros que no serian ningún impedimento para quedar, vernos en persona, y comprobar si todo lo que hemos pensado y sentido a través de un teléfono es real,
son una losa que pesa demasiado y una piedra enorme que entorpece el camino.

¿Porque hemos tenido que conocernos ahora, en plena pandemia mundial?

Y lo bueno que podría darnos esta situación, que es seguir conociéndonos más y más y ver si una relación seria factible o no, tampoco lo tenemos.

Porque te has distanciado a miles de kilómetros metafóricos,
muchos mas de los reales que nos separan.

Y no sé que hacer...

Apenas hablamos ya y tengo miedo de perder todo lo que había ganado en un mes,
y que en otro mes parece que se ha esfumado.

Tengo miedo de perder algo que nunca he tenido, que ilusa soy verdad?

Soy tan ilusa que estoy dispuesta a luchar todo lo que haga falta para demostrarte, que por mi parte, lo que siento y pienso es real y auténtico y que quiero verte cara a cara para poder decírtelo con palabras y mostrártelo con hechos.

Un día me dijiste que no desapareciera sin más, que si llegaba el momento de irme, me despidiera y te dijera adiós.

Ahora soy yo la que te lo pido.

No hay comentarios: